Tras varias décadas sin escribir, me despierto momentáneamente de mi letargo para ilustrales de los temas que acontecen en esta vuestra realidad que les rodea y les a trapa, les controla y manipula y se aprovecha de ustedes para, finalmente, rechazarles cuando no puedan darle más de si, ignorándoles mientras se pudren en alguna residencia para la tercera edad.
Cierto es que a comienzos de este año me prometí vanamente ser más optimista con la vida, pero ahora admito mi error, es imposible ser optimista. No obstante no todo está perdido; puede uno ser indiferente a la desgracia que le rodea y resignarte a la rutina de cada día, haciendo tuyos los objetivos que la sociedad nos inculca y luchar por ellos, aunque con ellos se vayan tu cordura y dignidad.
Ustedes se preguntaran a qué responde este humor de perros, puede ser la resaca que arrastro de la noche pasada, o puede ser que el sol me haya acabado quemando el cerebro. Pero lo que está claro es que mi estado no se debe a que el próximo martes empiece el nuevo curso universitaro en la UPC.
Les dejo a ustedes reflexionando sobre estos u otros temas, volviendo a silenciar las palabras de este patético blog, quien sabe si por mucho o poco tiempo.
Salutaciones
9/10/2006
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1 comentario:
pena que el suicidio sólo pueda hacerse una vez.
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